martes, 28 de diciembre de 2010

La Historia de Heather

http://www.theopenadoptionagency.org/espanol/stories/heather.html

La Historia de Heather

Mi nombre es Heather y soy una madre biológica. Nací el 9 de septiembre de 1977. Me embaracé a los 13 años de edad. Mi novio tenía 15 años y lo último que quería en aquel tiempo era sobrellevar una situación como ésta. Cuando le dije que estaba embarazada, me apoyó por un tiempo. Pero ese apoyo sólo duro un par de meses. Después de esos dos meses, rompimos nuestro noviazgo de dos años.

Cuando tenía veinticuatro semanas de embarazo, se lo dije a la madre del padre biológico. Inmediatamente le habló a mi mamá a su trabajo. Mi mamá se vino corriendo a casa para confirmar la llamada telefónica que le había hecho la madre del padre de mi bebé. Me llevó enseguida a una clínica de abortos. La asesora psicológica me dijo que mi embarazo ya iba demasiado avanzado para hacerme un aborto. Me dio un folleto sobre la “Adopción Abierta”. Hasta ese momento, yo estaba decidida de quedarme con mi bebé.

Mi hijo Robert John nació el 2 de noviembre de 1991 a las 3:42 de la mañana. Su llegada fue recibida con gran amor por todos en mi familia. Laurie, Frank, y mis dos papás estuvieron presentes en el nacimiento. El hospital cooperó mucho con nosotros. Robert se quedó conmigo en mi habitación. Pero cuando salí del hospital fue muy difícil dejar atrás ese precioso pedacito de mí.

El mismo día que regresé del hospital, la madre del padre biológico entabló una orden de custodia legal. Mi pobre mamá estaba deshecha, igual que la pareja adoptiva. Habían tratado de no formar sentimientos demasiado fuertes con Robert. El padre biológico finalmente accedió a no seguir con la petición de paternidad y la retiró. Luego conoció a Laurie y Frank. Creo que fue importante para él tener la tranquilidad de conocer a los nuevos padres adoptivos de Robert, quería asegurarse de que lo cuidarían y lo querrían. Finalizamos los últimos trámites de la adopción en mayo de1992.

Y ahora, dos años más tarde, somos una familia grande y nos llevamos muy bien. Me llaman, me mandan fotos, vivimos cerca, así que nos visitamos como cada tres meses. Fue la decisión más difícil pero también la mejor que he hecho en mi vida. Les di a Laurie y Frank el mejor regalo – el regalo de la vida. Cuando la gente ignorante piensa que la adopción es un acto egoísta, no entienden que cuando una madre piensa primero en el bienestar y futuro de su bebé, eso nunca puede ser egoísta. Pero hay gente que sencillamente no entiende eso. No se imaginan lo difícil que es una decisión como ésta. Me siento segura que Robert comprenderá en el futuro lo que hice por él y me lo agradecerá con amor por ello.

Heather

No hay comentarios:

Publicar un comentario

 
Solo Blog - Top Sites
posicionamiento web